martes, 30 de junio de 2009

CELOS INFANTILES ANTE EL NACIMIENTO DE UN HERMANO (II)

En la etapa de hijo único debemos fomentar actitudes que favorezcan su autoestima y confianza en sí mismo, es decir, concienciarlo de su propia valía personal:
  • Va a influir su comportamiento genético.
  • La consideración y crítica recibida por los padres, con el cariño y firmeza de que ellos tienen que sentirse ÚNICOS Y ESPECIALES: para ello, no hagamos comparaciones, no los ridiculicemos y valoremos sus esfuerzos y éxitos con premios afectivos.
  • LA AUTOESTIMA VA A CONSTITUIR EL CENTRO DE SU PERSONALIDAD.

  • Evitemos una EXCESIVA SOBREVALORACION del niño con expresiones como “eres el rey de la casa", “el único amor de mamá”, “el más hermoso de todos los niños”,...

  • Tenemos que transmitir al niño el carácter incondicional del cariño de sus padres: tienen que percibir que éste no está en función de su comportamiento.


DURANTE EL EMBARAZO

Se debe empezar a informar hacia el segundo trimestre, sobre el futuro nacimiento de su hermano; explicación que adaptaremos a su edad y grado de comprensión.

La idea que tenemos que transmitir es la de "GANANCIA", haciéndolo protagonista de la situación:

dejarle elegir adornos, nombre, etc.

Le comentaremos que al ser él el mayor, va a poder ayudar a mamá a cuidar al hermano. Va a tener juguetes nuevos y cuando sea mayorcito, tendrá un amigo para jugar y contarle sus cosas.


Le explicaremos el mundo del recién nacido mediante cuentos, fotos y videos propios de cuando él era bebé: que vea como se alimentan, se bañan, dónde duermen...


Insistir en que todas esas atenciones las ha tenido él también cuando era bebé y fue igualmente querido, y que sus padres siguen teniendo mucho cariño para seguir dándole.


Contarle quién le va a cuidar durante el parto (mejor el otro progenitor).

Intentar no cambiar sus rutinas.


Evitar que todo el embarazo gire en torno a la llegada del recién nacido.



DESPUÉS DEL PARTO

Su hermano será el primero en visitarle; es bueno tener un regalo preparado para él .

Dejad que el niño lo toque y acaricie; no ser sobreprotectores .

Una vez en casa, continuaremos reforzando las ventajas que tiene ser el hermano mayor, elogiando lo que hacen bien para reforzar su autoestima, tratándolo con mucho cariño y con firmeza .

Decidle que la llegada de su hermano no le quita nada de nuestro amor, que poco a poco APRENDERÁ A QUERERLE, es cuestion de tiempo.

Cuanto más pequeño sea es más difícil de entender el por qué tiene que querer a ese INTRUSO que le quita el amor de su mamá???

Pídele que te ayude a cuidar al bebe, pues le ayudará a fomentar su independencia y responsabilidad; si lo ignora por completo, no forzar la situacion:

  • cuando él crea conveniente se acercará solito.
  • Estimular con expresiones positivas todo acercamiento: "qué bien lo cuidas", "eres muy responsable", "ven que lo vas a bañar muy bien",...

Comentar con él lo que el bebé pueda sentir: "a él o a ella le gusta verte", "está llorando: será que quiere comer", "no sonreirá si le gritas, porque le asustas un poco",...


Alabar sus actitudes responsables.


Es importante que se le den privilegios de mayor: ver la tele, comer con los adultos, hablar con los mayores,... para hacerles ver que el crecer también tiene ventajas.


Comentarles expresiones como: "mamá está contenta porque puede estar contigo y podemos contarnos cosas, mientras que el bebé no puede; por eso me gusta estar contigo.


Valorar a nuestros hijos delante de familiares y visitas.

No disimular las demostraciones de afecto hacia el recién nacido delante suyo pues es contraproducente; lo que hay que demostrarle es que los padres tienen mucho amor para dar y cada hijo será ÚNICO para ellos.


Mantener su espacio, respetar sus lugares y pertenencias, no modificar su rutina diaria, dejarles hablar de sus cosas y escucharles, y una vez al dia compartir alguna actividad con él, manteniendo criterios educativos estables.


PROCURAR CONTROLAR SU TIEMPO ESPECIAL, seguir leyendoles el cuento de siempre al acostarlo, o el ritual previo establecido.

No demostrar más afinidad por uno que por otro.

Fomentar un trato individualizado, atendiendo a sus necesidades.


Emplear más premios AFECTIVOS: cómo pasar más tiempo jugando con ellos, que castigos y amenazas.


Emilia Navarro Hinojosa

Pediatra-Salteras

"El Club del Lactante"